Esas grandes desconocidas que muchos asocian solo con "programadores en pijama", pero que, spoiler alert, ¡son mucho más que eso!
Las hackatons.
Esas grandes desconocidas que muchos asocian solo con "programadores en pijama", pero que, spoiler alert, ¡son mucho más que eso!
Si alguna vez te has sentido intimidado por la palabra "hackathon" o te has preguntado si eres “suficientemente técnico” para participar, este post es para ti.
Sí, lo sé, todos los memes sobre hackatons muestran a un grupo de geeks programando hasta las tantas de la madrugada, pero, ¡sorpresa! Las hackatons son multidisciplinares.
Así que, si eres de marketing, diseño, comunicación, administración o incluso filosofía (¡sí, filosofía también tiene cabida!), puedes participar. Lo único que necesitas es creatividad y ganas de resolver problemas reales.
No te preocupes, en la mayoría de las hackatons hay espacio para todos los talentos, porque el trabajo en equipo es la clave del éxito.
Sí, has leído bien.
Puedes llegar sin saber nada de código o de diseño de apps y aún así ser un gran aporte. Las hackatons están pensadas para aprender y poner a prueba tu creatividad. ¡La innovación no tiene edad ni experiencia!
De hecho, la frescura de ideas sin prejuicios suele ser lo que hace la diferencia. Así que, si eres de los que todavía no se sabe bien lo que hace un "backend" o un "API", tranquilo, lo único que importa es tu capacidad para aportar ideas. ¡El resto se aprende sobre la marcha!
Las hackatons suelen durar entre 24 y 48 horas (sí, dormir es opcional), pero lo que pasa en ese tiempo puede cambiar el rumbo de muchas cosas.
Algunos proyectos que nacen en estas intensas maratones de creatividad, no solo se implementan en empresas reales, sino que incluso ganan premios internacionales. Eso sí, no esperes que te den un cheque al final del evento... la recompensa más grande es ver cómo tu idea puede tener un impacto real. Pero, ¡si también hay premios, mejor!
Vale, sí, siempre hay un premio al “mejor proyecto”, pero lo que realmente te llevas es algo mucho más valioso: la experiencia.
En una hackathon conocerás a un montón de gente con ideas similares a las tuyas (y otras totalmente diferentes, lo cual está genial), mejorarás tus habilidades de trabajo en equipo y, lo más importante, tendrás la oportunidad de enfrentarte a problemas reales del mundo empresarial.
Todo esto es lo que te hace más competente como estudiante y profesional.
Olvídate de esos típicos proyectos universitarios que solo sirven para sacar un 10. Aquí estás creando algo que realmente puede hacer la diferencia.
Participar en una hackathon no solo te da la oportunidad de conectar con empresas que buscan talento joven, sino que también te hace destacar.
Mientras tus compañeros están en sus aulas, tú estás resolviendo problemas reales que las empresas realmente necesitan solucionar.
De hecho, muchos participantes de hackatons han terminado consiguiendo prácticas o empleo directamente por su participación. Vamos, que estarás tan bien preparado que los empleadores se van a pelear por tenerte en su equipo.
Este mes en LinkedIn, presentamos a varios de nuestros estudiantes y sus proyectos. Y, ¡la favorita de nuestros seguidores fue Lydia! Y no es para menos.
Lydia, estudiante de la VIU, trabajó junto con la Cruz Roja para crear un Análisis de datos externos para la identificación de riesgos de vulnerabilidad social, ¡una auténtica ImpactMaker!
Si quieres saber más sobre sus logros y los de otros estudiantes, échale un vistazo a los posts: