La implicación de los jóvenes está cobrando especial relevancia en el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Ahora más que nunca, estudiantes, voluntarios, activistas y jóvenes de todos los ámbitos aúnan sus intereses comunes en lo que concierne a la sostenibilidad del desarrollo mundial. Juntos, generan gran impacto y lideran muchos de los cambios necesarios.
Los
Objetivos de Desarrollo Sostenible se adoptaron por los Estados Miembros en 2015 como un llamado universal. Se ha reconocido que el desarrollo debe equilibrar la sostenibilidad medioambiental, económica y social.
Cada objetivo tiene metas específicas de cara a 2030. Para lo cual se requiere la colaboración de gobiernos, del sector privado (organizaciones, empresas, fundaciones, etc), de la sociedad civil y los ciudadanos.
Importancia de la participación juvenil
La participación juvenil es clave para la implementación de los ODS. Jóvenes de entre 10 y 24 años representan casi un cuarto de la población mundial y están próximos a enfrentar muchos y graves problemas de la sociedad contemporánea.
Las encuestas revelan que la crisis medioambiental está entre sus mayores preocupaciones. Gracias a su liderazgo se ha impulsado la entrada de esta preocupación en la agenda política. Esto demanda una mayor participación en la construcción de su futuro.
Cada vez más conectados, estos agentes de cambio proponen soluciones innovadoras, creando un impacto social e inspirando el cambio político. Desde la ONU se han organizado eventos como
Global Goals Jam, donde equipos de personas de entre 18 y 30 años trabajan juntos en desafíos locales relacionados con los ODS.
De la misma forma, encontramos iniciativas que forman e inspiran a los jóvenes como The World’s Largest Lesson o SDGs in Action App . Encontramos también otros proyectos que impulsan además su capacidad de liderar el cambio hacia un mundo más sostenible. Como 1Planet4All de Ayuda en Acción o
YoungChangeMakers de
Ashoka, en donde los jóvenes lanzan iniciativas sociales, formado equipos y creado soluciones para el bien de todos.
El papel del talento joven
Las nuevas generaciones tienen un papel y un potencial indispensable en esta Agenda para el 2030 y se ven obligados a desarrollar nuevas competencias:
–Pensamiento crítico: se realizan preguntas para entender el mundo y las experiencias que tienen. Buscan el sentido, identifican y se enfrentan a la configuración del sistema.
–Liderazgo: muchos de los desafíos del desarrollo sostenible les afectan directamente y están llamados a ser actores esenciales en el logro de los ODS. Como empresarios, activistas y líderes comunitarios. Se debe empoderar a los jóvenes líderes y estimular el desarrollo de redes juveniles.
–Innovación y creatividad: tienen nuevas perspectivas además de conocer y entender mejor los problemas que enfrentan.
–Agentes de cambio: cuentan con una gran capacidad de generar un cambio. No solo en ellos si no en sus comunidades y el resto del mundo. Cada vez hay más jóvenes activistas además de contar con una mejor conexión en un mundo globalizado, pudiendo generar un mayor impacto gracias al trabajo en red.
–Comunicación: nos encontramos ante las generaciones mejor formadas de la historia. Además de las más creativas en la utilización de las tecnologías de la información, la comunicación y las redes sociales.
Conclusión
Por todo ello, es necesario el impulso de iniciativas que apoyen a los jóvenes en la ideación, consolidación y estructuración de proyectos alineados con los ODS. Diferentes organizaciones son conscientes de ello, por lo que han trabajado para activar e involucrar a las nuevas generaciones en estas temáticas. Se ha demostrado que los jóvenes se convierten en un aliado fundamental para la consecución de estos objetivos.
Para saber más sobre la implicación de los jóvenes en los ODS, visítanos en
U4impact.